martes, 18 de marzo de 2014

¿Quién quieres ser?

La mente humana cada día tiene ideas nuevas, abstractas, locas y originales pero algo pasa en nuestro diario vivir, cada mañana antes de comenzar el día, tomamos las mismas decisiones, seguimos una rutina que nos hace lucir como robots, en vez de mostrar la vida que brota dentro de nosotros, esa virtud de ser libres que nos permite explorar y así mismo descubrir cosas asombrosas que nuestro futuro tiene para darnos.
Dentro de los propósitos en la educación actual, se encuentra este pensamiento grandioso, permitir que el alumno tome sus decisiones según las situaciones que se le presenten para entonces cumplir con lo que en verdad desea. Pero hay un punto que es de gran interés para analizar ¿Por qué dependen tanto de la tecnología? Puede que los estudiantes desarrollen una habilidad emprendedora y tomen la iniciativa, pero ¿de qué nos sirve tener estas mentes brillantes si dependen de las TIC?
En los tiempos de ahora las personas buscamos siempre tener el nuevo celular que salió al mercado, la computadora inteligente, la tableta más delgada, la televisión con mayor número de funcionalidades, pero todo esto ¿para qué lo queremos? Exigimos todo pero ni siquiera sabemos la verdadera potencialidad en función que nos da aquel producto. El deseo de popularidad en nosotros los humanos crece descomunalmente que nos hace gastar nuestras riquezas en ropa, accesorios y objetos para quedar bien ante la sociedad. La tecnología que conocemos tal vez no sea la más nueva, pero para el nivel que ocupa nuestro país sí lo es. ¿Por qué la globalización no permite que la ciencia viaje a todas partes del planeta por igual?
Recuerdo cuando llegaron los nuevos pizarrones electrónicos a mi salón en la primaria, la profesora estaba disgustada porque no sabía cómo utilizar tan sofisticado artefacto, entonces me pregunto, si yo fuera el gobierno, ¿volvería a invertir en pizarrones nuevos aunque los maestros no sepan utilizarlo? ¿Para qué instalarlos y gastar gran suma de dinero si a los docentes no les gusta que les pongan a hacer cosas nuevas?
Por eso nuestro gobierno se cruza de brazos y piernas y nos ha dejado en el olvido junto con la educación. Exigimos que se invierta en la educación pero siempre optamos por lo ¨fácil¨, lo ¨conocido¨, no queremos saber nada de cursos para la nueva reforma, no estamos a gusto con los dispositivos viejos, ni con los nuevos que nos ofrecen. Recordemos que la civilización está modernizándose constantemente y no podemos quedarnos estancados en una rutina. Probemos cosas nuevas porque no sabemos que sorpresas nos pueden dar. Más perdemos cuando no intentamos por miedo a perder.

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